Mi semestre en Escocia

Jasmine nos cuenta su experiencia estudiando en el extranjero este semestre de primavera 

Foto de Jasmine durante una de sus excursiones visitando un parque público.

Hola, mi nombre es Jasmine Castillo. Soy estudiante de Framingham State University, pero actualmente estoy asistiendo a Queen Margaret University, en Escocia. Decidí estudiar aquí un semestre porque era lo más económico para mí. En FSU estudio español e inglés, pero durante este tiempo que he pasado en Escocia, he tomado clases de psicología. Estudiar psicología ha sido super diferente de lo que estoy acostumbrada, pero también fascinante porque he aprendido sobre cómo los seres humanos reaccionan dependiendo de cómo fueron criados. Los temas son complicados, pero dan muchas oportunidades para tener buenas conversaciones.

Los alumnos y profesores se llevan de una manera diferente en Escocia que en los Estados Unidos: por ejemplo, aquí, un estudiante se dirige a su profesor por su nombre en vez de usar alguna contracción con el apellido como Sra. o Sr. En mi experiencia en FSU, no he tenido ninguna profesora que me permita eso. No me he animado a hacerlo, porque se siente raro solo pensarlo. 

Además del aspecto académico, he tenido la oportunidad de explorar la cultura de Escocia, que es un poco diferente a la de los EE.UU. En las ciudades grandes, como Boston, uno puede andar caminando por las calles y sonreír a las otras personas que pasan. En cambio, aquí en las ciudades cerca de Edimburgo, parece que las personas hacen todo lo posible para no tener que interactuar con los demás. Vivo en una ciudad que se llama Musselburgh. Está a una media hora de la capital. Todos caminan rápido mirando el suelo. Tampoco piden permiso o disculpas cuando tienen que pasar, te empujan sin vergüenza. Todo el mundo se mantiene entre ellos mismos, no hay mucho sentimiento de comunidad, o durante estos ya tres meses que he pasado aquí, no lo he visto. La cultura que ellos tienen es más privada, pero en las noches, todos los bares o ‘pubs’ están llenos de personas. Especialmente cuando hay un partido de rugby, todo el mundo está tomando y disfrutando.

Vistas desde el Castillo de Edimburgo.

Extraño la comunidad que tengo en FSU con mis compañeras de español, pero lo bueno de esta experiencia es que me ha ayudado a ser más independiente. He tenido que aprender a vivir sola, cocinar y ayudarme a mí misma porque físicamente estoy sola aquí. He tenido la oportunidad de conocer a tres muchachas hermosas que también son estudiantes de intercambio. Siempre buscamos la manera de pasar más tiempo juntas. Vamos de compras, a comer o tomar un café. Aunque no sean salidas súper extravagantes, siempre la pasamos bien donde quiera. Nos hemos ayudado a sentirnos bien con todo porque todas estamos pasando por lo mismo.

¡Framingham State te extraño y volveré pronto!